EL PILT proyecta nuevas obras de infraestructura
En el marco del tradicional brindis de fin de año con periodistas, el presidente del Parque Industrial, Logístico y Tecnológico Villa María (PILT), Carlos Pizzorno, presentó los ejes estratégicos que marcarán la gestión del próximo año, con foco en el desarrollo de infraestructura, la consolidación del programa Nave para Emprendedores, y la adaptación del sector productivo a los cambios que atraviesa la economía argentina.
Pizzorno anunció que en 2026 el PILT avanzará en el desarrollo de las 55 hectáreas restantes de la Fase II, adquiridas en su momento por el Parque y donde ya se concretaron cesiones de espacio a la Universidad Siglo 21 y a EPEC, además de la radicación de MSU. “Vamos a proveer de infraestructura toda esa zona para poder iniciar la venta de terrenos con nuevas radicaciones. Es un paso determinante para seguir ampliando la capacidad del PILT y atraer inversiones”, afirmó ante los medios locales.
En este sentido, destacó que la experiencia acumulada en los últimos años llevó a revisar criterios de gestión y planificación del suelo industrial. Señaló que el Parque incorporó un enfoque más flexible en la relación con potenciales inversores, contemplando no solo a industrias con proyectos productivos propios, sino también a desarrolladores que puedan dinamizar la oferta de infraestructura.
“Aprendimos que la inmovilización de capital en tierra puede ser una limitante para muchas industrias. Promover inversores no industriales puede aportar agilidad y permitir que las empresas crezcan sin quedar condicionadas por su propio lote”, explicó.
El presidente del PILT resaltó además el impacto positivo del programa Nave para Emprendedores, que se consolidó como una de las experiencias más significativas del año. Subrayó que el acompañamiento inicial de la entidad permitió la evolución de casos emblemáticos en distintos rubros, tanto en industrias varias como en el sector alimenticio. “Es una forma de apoyar talento, voluntad y proyectos que muchas veces no cuentan con los recursos para iniciar. No se trata de regalar nada, sino de brindar un impulso inicial que puede transformar un emprendimiento en una empresa exitosa con el tiempo”, sostuvo.
Finalmente, Pizzorno compartió una reflexión sobre el escenario nacional, en un contexto de cambios “profundos y sorprendentes”, que impactan de manera diversa en los distintos sectores productivos. Indicó que la competencia con productos importados, la baja relativa del dólar y la reducción de aranceles representan desafíos para algunas industrias, pero confió en la capacidad de adaptación del empresariado argentino. “El talento y la previsión de muchos empresarios les dará la agilidad necesaria para atravesar esta etapa. Ojalá los cambios se den con el menor impacto posible sobre las personas y permitan una mayor eficiencia y proyección internacional de nuestras empresas”, expresó.
