Sin transición, Accastello arma su equipo con menos funcionarios

Sin transición, Accastello arma su equipo con menos funcionarios

En Villa María no hay transición, ni ordenada ni desordenada. No existe. En este tiempo no hemos visto fotos del actual intendente Martín Gill y del intendente electo Eduardo Accastello. El acuerdo, como siempre se dijo en esta columna, fue netamente electoral. Cada uno representa un espacio político diferente a pesar que los cobije el mismo signo partidario. 


 Por ello, Accastello avanza en el armado de su nuevo equipo sin tener en claro la situación económica de la Municipalidad. El gillismo no entregó hasta el momento ningún número. “No sabemos nada y no nos dan información”, señalan las fuentes más cercanas al jefe comunal electo. Hasta el 9 de diciembre gobernará Gill, el 10 comenzará Accastello. La transición ni siquiera formó parte de la agenda del actual oficialismo.

De hecho, el gillismo presentó un proyecto de Presupuesto y Tarifaria sin consensuarlo con el accastellismo. Ingresó al Concejo Deliberante y resta la aprobación en segunda lectura. Probablemente, los concejales entrantes introduzcan modificaciones que le señalen los nuevos funcionarios, principalmente Accastello.


 Accastello anuncia su gabinete en las redes sociales a cuenta gotas: ya confirmó a Guillermo Pieckenstainer en Economía; Adela Girardelli en Educación e Igualdad; Marcos Bovo en Gobierno, Cultura y Relaciones Institucionales; y Alejandra Barbero en Infraestructura y Desarrollo Urbano. Nadie más. El resto de los nombres los maneja bajo siete llaves.


 Sí se mencionan dirigentes como Pablo Rosso, Liliana Abraham, Rodolfo Bergamasco, Germán Tenedini, Agustín Turletti, entre otros, en puestos claves de la nueva administración. En apenas 10 días el organigrama habrá quedado confirmado y también los nombres que ocupen todos los casilleros. Una certeza: la planta política se reducirá entre un 15 y un 20% respecto a la actual, en línea con lo que plantea Javier Milei a nivel nacional; y que también aplicará Martín Llaryora en la Provincia.


 Hacia abajo la incertidumbre es total. Funcionarios de segundas, terceras y cuartas líneas esperan un llamado de Accastello que los sostenga en el cargo, o al menos que los ubiquen en otro lugar. “La renovación va a ser importante”, señalan las fuentes consultadas por Claves. Una incertidumbre mayor viven contratados y facturantes del Municipio, que han crecido en cantidad en los últimos años. El trabajo escasea y mantener la fuente laboral es primordial para muchas familias. El funcionario, como dice la palabra, cumple funciones. El tiempo de permanencia en el cargo lo determina el intendente. Los trabajadores, por el contrario, están en esa condición laboral (facturantes) porque el Estado avaló e incorporó la precarización como forma de contratación.


 El nuevo gobierno se piensa con menos planta política “pero con las mismas funciones”. No se desatenderá ninguna. Sí habrá fusión de carteras y mayores responsabilidades para los titulares. Por caso, Gobierno sumó a Relaciones Institucionales y Cultura.

Todos descuentan que Marcos Bovo será el armador principal del Festival Internacional de Peñas. Educación e Igualdad (desarrollo social) también se unen. Lo mismo que Infraestructura y Desarrollo Urbano, la vieja secretaría de Obras Públicas. Veremos el resto del gabinete. 


 “El gabinete tiene que ser un equipo, no depender de Accastello como fue en la anterior gestión. Todos tienen que tirar para el mismo lado”, expresó esta fuente consultada por este medio. Todavía quedan lugares por ocupar. Por ejemplo, en Comercio e Industria, secretaría que se creó por ordenanza pero nunca se conformó. Los empresarios, comerciantes y emprendedores esperan cambios en áreas claves como Obras Privadas y Habilitaciones, ya que han tenido más dificultades que soluciones en los últimos 8 años.


 Se vienen tiempos difíciles en la Argentina. El propio Milei habló de “estanflación”. Solo municipios atentos a las demandas de sus poblaciones podrán sortear este momento con mejores respuestas, con foco en la contención social. Serán tiempos de atajar penales, los goles vendrán más adelante. Accastello quiere armar el mejor equipo, pero la estrategia de juego la conoceremos el 10 de diciembre. Por ahora todos, gobernadores e intendentes, se preparan para dos líneas de cuatro y patear para arriba. Luego veremos si cruzan la mitad de cancha y crean situaciones de gol.

Solo las urnas dicen la verdad

Lo más difícil en el análisis político es aceptar y reconocer que la realidad social puede ser bien distinta a la que nosotros deseamos. Es muy fácil caer en la tentación de arrogarse “la...

La mirada política puesta en el domingo

El domingo se terminan todas las especulaciones previas a cualquier cierre de listas. Sí, el domingo es el último día para inscribir candidaturas a diputados nacionales y todo el análisis...

Cambio de estrategia: el cordobesismo va contra Milei

El cordobesismo, palabra y concepto político inaugurado por el exgobernador José Manuel De la Sota, que luego continuó Juan Schiaretti y ahora Martín Llaryora, vive momentos de extrema...

Los gobernadores juegan al centro

El anuncio no sorprende, pero abre un interrogante sobre la reconfiguración del escenario político argentino. El reagrupamiento de gobernadores de distintos partidos en un espacio llamado “Un...