Accastello y su primera (nueva) apertura de sesiones

A partir de las 10 de la mañana el intendente Eduardo Accastello abrirá las sesiones ordinarias en el Concejo Deliberante. Será su segundo discurso ante los nuevos ediles, si se toma en cuenta el acto de asunción realizado en la costanera.


 El oficialismo prepara una gran recepción para el jefe comunal. Las invitaciones superan las habituales, las gradas estarán colmadas. Habrá música funcional para amenizar la espera y el discurso se transmitirá por streaming con varias cámaras. Primero hablará el presidente del cuerpo, Juan Pablo Inglese, que en la sesión preparatoria fue ratificado en el cargo por sus pares. Luego lo hará el propio Accastello.


 La gran pregunta que sobrevuela por estas horas en el mundo de la política local, “porque el discurso lo tiene bajo siete llaves”, como dijo una importante fuente consultada por este medio, es saber si expondrá la realidad económica y financiera del Municipio. Es decir, si trazará un diagnóstico de lo que recibió de la administración anterior de Martín Gill.


 Días después de asumir señaló que la deuda superaba los 7 mil millones de pesos. Le pidió al Concejo que declare la emergencia económica y comenzó un proceso de verificación de deuda, que terminó el pasado 28 de febrero. Por ende, con casi tres meses frente a la gestión, el escenario económico y financiero municipal lo conoce a la perfección. 


 Pero será una decisión política exponerlo, detallarlo, contarlo; u obviarlo y plantear directamente los objetivos del 2024. Si decide exponer los números de la Municipalidad, habrá que analizar hasta dónde apunta contra la gestión anterior; y si le pondrá nombre y apellido al desaguisado económico que recibió el 8 de diciembre, cuando se realizó el arqueo de caja.


 El gillismo tiene dos concejales y hasta el momento “han sido orgánicos”, como señaló una fuente del Palacio Legislativo. No han mostrado discrepancias y acompañaron la emergencia económica y los aumentos de taxis y colectivos, por ejemplo. Accastello deberá hacer equilibrio en el discurso para no herir susceptibilidades, en caso de tratar el tema. Si decide obviarlo, le habrá faltado algo por decir. Veremos cuál es la decisión final y cómo lo hace.


 En Villa Nueva, por caso, el intendente radical Ignacio Tagni organizó una conferencia de prensa y manifestó con absoluta claridad el Municipio que recibió de su antecesor, el peronista Natalio Graglia. Allí no había conflicto de intereses. Al contrario, políticamente le servía a Tagni. En la apertura de sesiones de hoy -tal vez- repita los conceptos de aquella conferencia ante los medios locales.


 No es lo mismo para Accastello, porque su antecesor también es peronista, forma parte del gobierno de Martín Llaryora y cuenta con dos ediles claves en el Concejo. Si bien la pelea gillismo- accastellismo, accastellismo-gillismo, data de casi una década y la ruptura siempre pareció inminente, el hilo nunca se cortó del todo. Por eso Gill ganó en 2019 y Accastello en 2023, con la unidad como acuerdo general macro para sostener la intendencia a pesar de las múltiples diferencias políticas.


 Este es un nuevo capítulo. Ahora quien administra el poder político local es el accastellismo y el gillismo mantiene su estructura en la Universidad Nacional, lejos de la Comuna. Accastello prescindió de funcionarios de Gill y casi que no dejó ninguno en el Palacio Municipal. Se fueron prácticamente todos. 


 Pero sabe que sí necesita los dos concejales para asegurar la mayoría parlamentaria, y además, en algún momento tendrá que negociar políticamente. Ya sea en 2025, o en 2027. Por ahora, Accastello y Gill están bajo el paraguas del PJ provincial, con el gobernador Martín Llaryora a la cabeza y ese cobijo permite inferir negociaciones menos dificultosas en todos los órdenes si el escenario continúa de la misma manera. Es difícil hacer ciencia ficción en este país.


 Accastello sí hablará del nuevo estacionamiento medido, de las nuevas unidades de colectivos, de la reorganización del tránsito en la zona céntrica. También de la seguridad y las multas por videovigilancia. Destacará la organización del Festival de Peñas en un contexto económico complicado y proyectará las obras y programas posibles de ejecutar durante el periodo 2024. Tal vez anuncie el envió de algún proyecto de ordenanza en particular para que lo trate el cuerpo deliberativo.


 Son tiempos de gestión, el día a día domina la agenda pública. Nadie se atrevería a mostrar una pelea política-electoral en tiempos muy alejados de las fechas comiciales. Sin embargo, los partidos se juegan todo el tiempo y en todas las canchas. Hoy es el turno de Accastello.

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